Recientemente se presentó en el Congreso de los Diputados la nueva Oficina de Ciencia y Tecnología del Congreso, una iniciativa conjunta del propio Congreso y la FECYT. Al acto asistimos investigadores y parlamentarios de todos los grupos, y en él se presentaron los cuatro primeros informes de esta nueva oficina. Además, a lo largo de la semana intercambiamos experiencias con los diputados, para conocer mejor cómo es su día a día y el proceso legislativo, y cómo la evidencia científica puede contribuir a la toma de decisiones en política.
La nueva Oficina C tiene ahora la tarea no tan fácil de convertirse en un instrumento eficaz de asesoramiento científico en el centro legislativo nacional -además, el modelo es fácilmente exportable a los parlamentos regionales; de hecho, sus mismos impulsores tienen un proyecto para poner en marcha en el parlamento valenciano una oficina similar en 2023.
No se trata de prescribir qué políticas debemos adoptar, pero sí de informar sobre cuál es la realidad a la que deben responder. Y es que las decisiones informadas por la ciencia tienen más posibilidades de acertar.