Proponen un nuevo sistema geoestadístico para mejorar la gestión de los municipios
Investigadores de la Universitat Politècnica de València y la Universitat de València han diseñado una nueva metodología de análisis geoestadístico que permite conocer con mayor nivel de detalle las características económicas, sociales, etc. de cualquier municipio, en función de la distribución de su población.
Se trata de un modelo que es capaz de procesar grandes volúmenes de información – procedentes de fuentes oficiales, como el Instituto Nacional de Estadística (INE).- desagregándola en unidades menores mediante uso de datos públicos complementarios (usos del suelo, datos LIDAR, datos catastrales, …), lo que lo convierte en una herramienta de gran valor de gestión política. Su trabajo ha sido publicado en la revista Geographical Analysis, en donde aparecen valorados y validados hasta 17 métodos de desagregación distintos.
La principal diferencia respecto a otros métodos utilizados a día de hoy reside precisamente en su desagregación espacial, ya que va mucho más allá de las unidades cartográficas menores con información estadística disponibles en las que hoy se divide nuestro territorio (éstas son las secciones censales). De este modo, se hace posible un conocimiento más completo de nuestras zonas habitadas y establecer políticas de gestión urbana más adecuadas y racionales, permitiendo que la toma de decisiones de los gobiernos sea más objetiva.
“Asociadas a las secciones censales hay mucha información estadística cuyo análisis es utilizado para articular las diferentes políticas de gestión de las ciudades. Y si somos capaces de diseccionar el territorio en espacios mucho más pequeños y repartir su población en ellos, podremos conocer mejor cuáles son sus características o sus necesidades dotacionales. Y, a partir de estos datos, priorizar unas u otras acciones en beneficio de esa zona concreta del municipio y sus habitantes”, explica Isidro Cantarino, investigador del Departamento de Ingeniería del Terreno de la Universitat Politècnica de València.
Modelo flexible
Otra de las principales ventajas de este nuevo modelo es que puede aplicarse cuando las secciones censales de los municipios varían. “Hasta el momento, estos cambios implicaban la pérdida de la información asociada a las regiones anteriores, con las consecuencias que para la correcta toma de decisiones ello conlleva. Con nuestro nuevo modelo, esto puede ser subsanado y podemos utilizar sin problemas toda la serie histórico-estadística de la zona, lo que repercute también en una mejor y más objetiva gestión del municipio”, apunta José Manuel Pavía, investigador del Departamento de Economía Aplicada de la Universitat de València.
Entre sus múltiples aplicaciones, los investigadores señalan también que puede utilizarse para hacer modelos de movilidad de la población, evolución del voto e incluso estudios epidemiológicos.